jueves, 9 de abril de 2009

fragmentos de una mente extraña habitando un cuerpo desconocido



es extraño cuando piensas saberlo todo, pero es mas extraño aun cuando realmente lo sabes

Capitulo 4

Eran las 4 de la tarde, un día de enero, el frio característico de la época se filtraba por mi ropa, llegando hasta la piel, el mejor clima del año, era una tarde con un poco de viento, el cielo despejado, el sol poco a poco empezaba su camino hacia el atardecer, tarde perfecta tal cual para ir a tomar un atolito de elote al puesto de doña clemencia. Doña Clemencia era realmente un ejemplo de las mujeres guatemaltecas, madre y padre de 3 criaturas desde hacía ya un par de años, y no era culpa del desamor, sino de la violencia del país, ya que un marero le había quitado la vida a su esposo, que trabajaba de chofer de la ruta 40R, por no pagar el ‘’impuesto de circulación’’, doña Clemencia tenía en ese entonces 3 hijos, el más grande de 13 años y 2 nenas, una de 9 y la otra de 3, ahora 4 años después, José el más grande está a punto de terminar sus estudios de bachiller en ciencias y letras y sueña con poder ingresar a la universidad y estudiar antropología; Lucia con 13 es ya toda una conocedora de la comida típica de Guatemala, divide su tiempo entre hacer las tareas de la escuela y buscar nuevas recetas para ayudar a su mama, sueña con algún día convertir el puesto de tostadas, chuchitos y atoles de su madre en un elegante restaurante, y por ultimo esta paulita, que emocionada este año empezó a cursar la primaria. Doña clemencia, se levanta todos los días a las 4 am y empieza a preparar desde ya los atoles, se despide de sus hijos a eso de las 6 am y agarra camino hacia la esquina de la 20 calle y 4 av de la zona 10, ahí monta su improvisado puesto y empieza a ofrecer, panes con chile, con frijol, atol de una variedad de sabores y las típicas champurradas, al terminar a eso de las 9: 30 am, se dirige hacia un apartamento en un nuevo edificio sobre la avenida las Américas y empieza con las tareas de limpieza, siempre termina rápido ya que nunca hay mucho que ordenar o limpiar, deja hecho el almuerzo y regresa a su casa, justo cuando los niños están de regreso, rápidamente les prepara su almuerzo, miran las noticias de la 1 mientras almuerzan, ya por la tarde se sienta con sus 3 hijos y juntos se ponen a hacer las tareas, discuten y comentan lo que hicieron en el día, por la tarde, Lucia empieza prepara la cena, mientras José acompaña a su mama a comprar las cosas para el día siguiente, tranquilamente cenan y a las 9 pm los acuesta mientras ella empieza a cocinar lo que venderá mañana. Y ahora porque es un ejemplo, bueno doña clemencia a pesar de todo lo que ha sufrido ha sabido sacar adelante a sus hijos, a pesar de la pobreza sus hijos nunca se relacionaron con maras y les inculco los valores suficientes para que ellos se desarrollaran en la sociedad, toda una gran heroína, pero bueno esa no es la parte interesante de su historia. Fue hacia un par de días, no recuerdo porque desperté tard
e, después de 46 noches sin sentir tus labios besándome,pero desperté y vi una silueta de una mujer a un costado de mi cama, medio abrí los ojos, y ella exclamo.
-Vaya hombre, ya era hora de abrir los ojos, vamos para arriba, que hoy tiene el cumpleaños de aquella su amiga, que lo ha estado llamando…-
al escuchar esas palabras otra vez la oscuridad se apodera de mis pensamientos y…
suena un teléfono, un mensajito de texto…
Ella: oye tengo que decir algo.
Él: que paso?
Ella: pues he estado pensando y ya no quiero estar contigo… ya no quiero andar.
Él: ¿Por qué?
Ella: no se es que… son muchas cosas, cosas de tu personalidad que ya no aguanto, tú la verdad tienes muchos problemas y ya no quieres resolverlos, y cuando los resuelves no me gusta la manera en que lo haces.
Él: yo no tengo problemas.
Ella: ay, si los tienes solo que lo niegas.
Él: bueno entonces si crees tú que tengo problemas y dices quererme, entonces ayúdame a ya no tenerlos.
Ella: es que….ese es el problema…
Él: ¿qué?
Ella: que ya no te quiero.
Él: y ayer que me dijiste te amo, ¿eran mentiras?, ¿no lo sentías?
Ella: perdón.
Él: ¿desde cuándo estas así?
Ella: es que no quiero lastimarte.
Él: ¿desde cuándo?
Ella: es que ya lo había pensado pero…
Él: entonces si ya lo habías pensando, me estás diciendo que todo este tiempo que duramos, me decías mentiras, me decías que me querías sin sentirlo?
Ella: no me llames, no me busques, ya mi decisión está tomada.

Y ahora tomo para mantenerme tibio y así poder asesinar las memorias y ya no en ella pensar, si es imposible para mi poder sentirme mejor, como esperar que algún día alguien le fuera a importar.
Días más tarde, el la va a buscar a su casa, esperando que de alguna extraña forma ella regrese con él:


Él: hola
Ella: ey, que paso
Él: oye vengo a verte para decirte que… es que te quería decir que te extraño… tu no?
Ella: no se me hace justo decírtelo
Él: ¿por qué?, y se te hace justo lo que me hiciste?, yo se que me extrañas, yo se que quieres estar conmigo… q no me vas a decir nada
Ella: es que ya te dije todo lo que te tenía que decir, estoy decidida a lo que paso, te lo juro q nada va a cambiar.
Él: entonces no te importa lo que vengo a decirte
Ella: si me importa pero te lo juro que no va a servir de nada
Él: que fue lo que paso, porque de repente mandaste todo a la fregada
Ella: ya déjame por favor, no quiero que me estes esperando porque nada va a cambiar
Él: ese es mi problema
Ella: tienes razón
Él: sabes nadie te va a querer como te quiero yo…nadie
Ella: oye ya me tengo q ir cuídate mucho ok
Él: adiós

Y ahora tomo para mantearme tibio y así poder asesinar las memorias y ya no en ella pensar, y yo caí en la promesa de una vida feliz, como duele saber que no será posible otra vez. Ese mismo día, ella platica con su mejor amiga:
Amiga: oye ya me entere que cortaron, que paso?
Ella: pues nada es que me di cuenta que no era para mí
Amiga: después de tanto tiempo, de todo lo que él hizo por ti?
Ella: pues si es que aparte la verdad me arrepentí de haber vuelto con él hace 2 años

Y ahora tomo para mantenerme tibio y así poder asesinar las memorias y ya no en ella pensar, yo o caí en la promesa de una vida feliz, como duele saber que no será posible otra vez…

De pronto me doy cuenta q estoy manejando, por la zona 10, hacia otro nuevo comercial que acaban de inaugurar, hacia un restaurante de comida italiana, miro asiento del copiloto y un regalo, pero no recuerdo haberlo comprado. Llego al comercial, estaciono el carro, tomo el regalo y me bajo del auto, camino hacia el restaurante, todo esto como si mi cuerpo estuviese en algún modo de piloto automático, y cuando entro al restaurante ella estaba ahí sentada, la vi y por fin volví a tener control de mi cuerpo. y ahí estaba Gaby, mi querida amiga Gaby, teníamos tal vez unos 15 años de conocernos, aun recuerdo el nuestro primer día de clases, ella con un vestido rojo, algo tímida, con su loncherita rosada, la maestra la sentó a la par mía, y desde ese momento una gran relación nació, cursamos juntos la primaria, los básicos, y el diversificado, crecimos juntos, jugamos juntos, y cuando nuestras hormonas empezaron a liberarse nos dimos nuestro primer beso, pero era más curiosidad que otra cosa, después nos dimos cuenta que en verdad éramos amigos, como hermanos, por lo cual ella tenía sus novios y yo mis novias, pero aun así habían un poco de celos de parte de los 2, mas de parte de ella, siempre me cuidaba, tal vez previniendo, para que no saliera lastimado, pero yo también la cuidaba a ella, un día, su novio se beso con otra tipa, y ella llego llorando a mi casa, y ahora el tipo le faltan un par de dientes. Pero bueno, ahora si ya recuerdo el regalo es de ella, hoy es su cumpleaños, pero no la miraba como normalmente la miro, ella siempre tiene una sonrisa, aun cuando esté pasando por los peores momentos, ella siempre sonríe, de ella aprendí a siempre verle el lado positivo a las cosas, pero no, ese día no tenía la misma sonrisa, no quise preguntarle, ya que a veces es molesto que la gente pregunte, así que decidí esperar a que ella me lo contara, platicamos sobre otras cosas, recuerdos de nuestra vida escolar, cuando ella finalmente me lo conto, y es que hacia un par de semanas había terminado con su novio, recuerdo el día que se conocieron, el era nuevo ese año, y desde que ella lo vio, supe que serian novios, fueron novios un par de meses y todo parecía ir normal, hasta que ella lo engaño, yo la regañe y me enoje un par de días por eso, pero ella me decía que ya no lo quería y que por eso lo había hecho, la comprendí en ese instante, ella lo olvido y el no, ella conoció a alguien más, pero él no, la espero, y al final ella se dio cuenta de eso, y hace 2 años regresaron. y mientras me iba contando lo que había pasado, de algún modo yo ya lo sabía, y parecía q yo iba poniendo las palabras en su boca, extraño probablemente, y con ese pensamiento me quede todo el camino. no fui a casa directamente, maneje sin rumbo un par de horas, pensando en la extraña experiencia que había sucedido, y cuando al fin regreso a la casa, doña clemencia todavía estaba, la encuentro sentada con la mirada hacia abajo y cuando me mira noto la tristeza de sus ojos, y es cuando me dice, - patrón, llamaron y la seño Gaby…- y un silencio invade la casa, el ambiente se torna frio y miles de pensamientos, ahogan mi mente y me dice, - seño Gaby está muerta, un terrible accidente, ella iba camino a casa cuando un chofer ebrio la choco por atrás-… y empecé a visualizar lo que había pasado. nos despedimos en el restaurante, y ella se quedo viendo ropa de uno de los almacenes del comercial, compro un par de blusas y una bolsa, se subió al carro y empezó su camino hacia su casa, ya que por la tarde iba a tener una refacción por su cumpleaños eran las 3:30 pm cuando por fin tomo el periférico camino a su casa en zona 2 colonia el zapote; por otro lado, Fernando, su ex, empezó el día como usualmente lo había hecho desde hacía un par de semanas, bebiendo en un desesperado intento por borrarla de su memoria, el sabia que hoy era su cumpleaños por lo cual tenía más razón por tomar, estaba en la casa de un su amigo, en la zona 7, colonia ciudad vieja, justo en el carril auxiliar del periférico, eran las 3:20 pm ya llevaba más de 15 cervezas, y en su desesperación tomo el carro y empezó su camino hacia la casa de ella…ella tenía carro nuevo, sus padres se lo habían comprado por motivo de su cumpleaños, el iba a toda velocidad por el periférico, ella iba manejando despacio, fueron unos segundo de distracción, ella se cambio de carril si poner el pide vías y el ya no pudo parar, la choco en la parte trasera haciendo que ella perdiera el control, su carro empezó a dar vueltas y choco contra un árbol, los bomberos llegaron casi que de inmediato y empezaron las maniobras para sacarla, aun estaba con vida, el falleció en ese instante, pero ella seguía con vida, con ganas de luchar, con la quijada de la vida la logran sacar, y la trasladan al hospital Roosevelt, pero… no logro llegar con vida. Caí en llanto, nuevamente había perdido a alguien importante, en ese instante creí en dios, solo para poderle reprochar y alegarle, exigirle una respuesta de porque se la había llevado, doña clemencia me abrazo y me dijo, - si las personas en este mundo fuesen inmortales, desde hace tiempos ya habríamos inventado la muerte, porque la gente necesita morir, simplemente no sabemos verlo desde ese punto de vista.- y esas palabras me dejaron helado.

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